domingo, 15 de julio de 2007

À LA GARE

Las estaciones, los aeropuertos. Lugares donde se aprende la insignificancia, donde lo efímero porta leontina, donde se gestan las grandes tragedias, donde la dicha siempre vuelve el rostro y agita la mano levemente. La estación, el aeropuerto, son la cadencia de un abrigo por la espalda, una película de tintes algo ajados. Esa hermosa fragancia del sepia.
En las puertas de las estaciones, de los aeropuertos, los besos son más besos. Debo ir a buscar un beso y una rosa a la Gare d’Austerlitz. Un avión me espera, para llevarme hasta mi historia. Ojalá ustedes me esperen también, al menos unos días. Hasta pronto.

9 comentarios:

C.C.Buxter dijo...

Ah, París... cómo me hicieron desaprovechar aquel viaje... y qué bello el beso de la foto, aunque al final resultase que eran actores a sueldo...

Aquí esperaré, aunque con impaciencia. ¡Que vaya bien!

Luis López dijo...

Toujours Paris nous restera. L'attente sera tendue, mais avec assurance elle aura une récompense

Anónimo dijo...

Buen viaje :-)

Javier Menéndez Llamazares dijo...

Lugares que son no-lugares, como nos desveló el pensador francés.
Te echaremos de menos, mientras das vida a tu propia instantánea à la Doisneau.
Bon voyage!

JML dijo...

Queridísima Ana:

Lamento llegar tarde y sin haber vuelto del todo. Su beso de vd. queda en el aire y me llega desfallecido, como una pavesa. Flota en el aire un corazón que arde, el suyo, y uno que se rompe, el mío. Ambos entran y salen de la misma historia.

Un beso volado y un hasta luego

uminuscula dijo...

que te besen mucho y bien!!

Filisteum dijo...

"Y entre los muertos habrá siempre una lengua viva para gritar que París sí que se rinde. Y sin disparar un tiro.
Hay ciudades que se prefieren putas a despeinadas"

Omito la fuente

:-))))

Anónimo dijo...

Esa foto acompañó a una pequeña parte de mi vida.

Esa imagen ha estado delante de mi retina. A veces antes de expresar mensajes de amor, a veces antes de buscarlos.

Siempre conseguí otros besos.

L.
beorbi@hotmail.com

Anónimo dijo...

Esa foto acompañó a una pequeña parte de mi vida.

Esa imagen ha estado delante de mi retina. A veces antes de expresar mensajes de amor, a veces antes de buscarlos.

Siempre conseguí otros besos.

L.

Beorbi@hotmail.com