martes, 24 de abril de 2007

VICTORIAS MÁS ALLÁ DE LA MUERTE

Hay victorias que llegan más allá de la muerte. Palabras que desafian el tiempo y los caminos. Aquí dejo unos poemas en los que últimamente me afano. Son traducciones de epitafios latinos en verso que aparecerán pronto publicadas. Sit tibi terra leuis.

Fortuna spondet multa multis, praestat nemini.
Viue in dies et horas, nam proprium est nihil.

Fortuna todo a todos les promete
pero a nadie le cumple lo ofrecido.
Exprime cada día, cada hora:
vive, pues nada aquí nos pertenece.

Ephesia Rufria mater et coniux bona
hic adquiescit, quai mala periit febri
quam medici praeter expectatum adduxerant.
Solamen est hoc simulatique criminis
nec uera uox: tam dulcem obisse feminam
puto quod deorum est uisa coetu dignior.

Aquí yace Efesia Rufria, esposa
y madre ejemplar, que enferma de fiebre
por causa de los médicos, murió.
Mas estas solamente son, quizá,
palabras de consuelo para un crimen
inventado: mejor pensar prefiero
que ha muerto tan dulcísima mujer
por ser digna de unirse con los dioses.

Boneis probata, inueisa sum a nulla proba
fui parens domineis senibus, huic autem opsequens.
Ita leibertate illei me, hic me decoraat stola.
A pupula annos ueiginti optinui domum
omnem. Supremus fecit iudicium dies,
mors animam eripuit, non ueitae ornatum apstulit.

Alabada por la gente respetable,
nunca censurada por mujer alguna,
bien obediente con mis antiguos dueños
y en especial complaciente con el último,
por tales cosas me hicieron libre aquéllos
y éste me otorgó la estola de matrona.
Aun siendo niña y durante veinte años
atendí la casa entera. La justicia
hubo de hacerse el día supremo, pues
se me llevó el alma la muerte, pero
borrar no pudo lo digno de mi vida.

Quod edi bibi, mecum habeo, quod reliqui, perdidi.

Cuanto comí y bebí, conmigo llevo.
Perdido está lo que dejé pasar.

jueves, 12 de abril de 2007

MÁS VALE TARDE QUE SIEMPRE


Sobre la reedición de El Regreso de Conrad en la editorial Funambulista. Traducción de Juan Max Lacruz.
En un cuadro de Vilhelm Hammershøi de título irrelevante, una mujer abre una puerta mientras se gira para mirar, en un último vistazo, la vida que está a punto de dejar atrás. A diferencia de las restantes escenas burguesas de interior del artista danés, en que sólo se presenta una habitación cerrada con una puerta o ventana tras la que intuimos que arde el mundo, en este cuadro la casa entera está a la vista, hay varias puertas abiertas y se aprecia un largo pasillo que nos habla del pasado. La mujer del cuadro se vuelve hacia ese pasillo en un gesto final. El camino que abandona late en el pomo de la puerta, y en la palma le quema, también, como una ortiga, la ruta que ha decidido retomar. La maravilla del cuadro de Hammershøi –haría mejor papel en la cubierta de esta edición de Conrad que la ilustración elegida– radica en que es una escena de ida y vuelta, que traduce a la perfección la partida de la adúltera y asimismo su regreso. El mismo lugar, la misma duda, idéntica resolución, la misma mujer que tiembla –o quizá no– y, con seguridad, la misma ropa: el vestido largo de la huida, que es más largo y más negro cuando vuelves. Cuando la mujer se fue, su pensamiento era muy claro: más vale tarde que siempre. Por eso abandonó a su esposo, dejando atrás un siempre que era más denso que la muerte. Ahora que regresa, sigue pensando lo mismo: más vale conocerse tarde que mentirse siempre. Por eso vuelve, la mujer: ella sabe que él la odia, que no podría perdonar cuanto le ha hecho, y sabe también cuánto le odia ella a él desde el comienzo de los tiempos. Por eso vuelve: porque sólo instalados en el odio es posible seguir adelante. El odio: esa argamasa de los días en común. Cuando sólo fumar te da placer, las puertas se cierran, el pasillo queda atrás y la escena burguesa de interior recobra su sentido. Qué bien lo pintó Hammershøi. Y qué bien lo cuenta Conrad.

domingo, 8 de abril de 2007

UN MEME

Debo agradecer a un amigo bloguero, Javier Menéndez Llamazares, que me haya impulsado a abrir este nuevo blog. Hasta ahora tenía otros para cosas supuestamente serias, pero lo enjundioso del día a día no aparecía por ningún sitio. Así que este "Hablemos de Victorias" se lo dedico a él.
Javier me ha invitado a un juego a triple banda. La cosa va de preguntas, cinco en concreto, que debemos responder, bien justificadas, tres blogueros:

Un libro que no pudiste terminar de leer
Una película que te aburrió
Una canción (o grupo) que detestas
Un anuncio que te convenció para no comprar el producto
Un personaje público al que muchos admiran y que tú no consigues entender por qué

La idea es que los tres incluyamos el juego en nuestra bitácora, para seguir las evoluciones del gusano, y que podamos comparar nuestras fobias abiertamente, al tiempo que invitemos a otros tres a sumarse al balbuceo. Aquí incluyo el enlace al post de Javier. Y aquí van mis respuestas. Al que le apetezca participar, que no se prive. De todos modos, invito personalmente a mis amigos Regino Mateo, Asfoso y Javier Pérez .


Un libro que no pudiste terminar de leer
"El arco iris de gravedad", de Pynchon. Como es autor ensalzado por doquier, y no había leído nada suyo, pensé que lo mejor era meterme dosis doble. "El arco..." era el libro más gordo del autor, y con él cargué vía Internet (Casa del Libro). En cuanto lo vi me horrorizó, y hojearlo me convenció de que no estábamos hechos el uno para el otro. Lo devolví a los pocos días, consciente de mi error, pero tardaron en reintegrarme el dinero casi dos meses... y el tocho no era precisamente baratito.

Una película que te aburrió
"Hoy empieza todo", de Tavernier. Logré convencer a un no cinéfilo de que fuera a verla conmigo; aún recuerdo sus bostezos (prefiero no pensar en sus íntimas maldiciones). Aunque Tavernier no está entre mis favoritos del cine francés, he visto cosas suyas bastante más interesantes. Pero este "Hoy empieza todo" llegó a parecerse a "Esto no termina nunca". Una de las dos únicas veces que me he salido del cine; la otra fue con ese bluff llamado "Amelie".

Una canción (o grupo) que detestas
Hay un solista que detesto realmente: Melendi. No sé muy bien qué me resulta más deleznable, si su nombre, su aspecto o su ¿música? En cuanto a grupos, "Estopa" es de lo más infecto que ha producido España en las últimas diez o doce décadas. Y esas horribles letras llenas de palancas de cambio, cadenas de montaje y coches cutres...

Un anuncio que te convenció para no comprar el producto
El de Ronaldinho y el desodorante. ¿Alguien lo entiende?

Un personaje público al que muchos admiran y que tú no consigues entender por qué
Iker Jiménez (es broooma). No sé... para mí nadie es admirable salvo Bach, Cervantes y algún otro como estos, o sea que nunca entenderé por qué se admira a nadie que esté vivo, y menos aún que esté vivo en el siglo XXI. De buen grado hubiera dicho Al Gore, pero se me han adelantado.

Un abrazo para todos.

VICTORIA SEGUNDA


David Elvira me ha regalado una de sus hermosas fotografías para mi "Poética".

Nunca hasta esta imagen pensé que un enigma pudiera retratarse.


POÉTICA

“El enigma resuena desde las mandíbulas feroces de la virgen.”
PÍNDARO

Me revisto con la suprema autoridad
que da la ceremonia macerada por los siglos;
me cubro de una clámide impecable,
me sé perfecta incluso exánime
en el suelo
o cuando abierta,
receptiva,
en mi cátedra sagrada
me invade la total sabiduría de la tierra.
Nadie cuestiona mi palabra,
este verso mío tan confuso,
este veneno sublime que os ofrezco
en todo rito antes del campo de batalla.
Por eso me lees hoy, años más tarde,
y me lees pura, virgen y absoluta
igual que cada línea en que te miento,
enigma inmaculado cada libro.

VICTORIA PRIMERA

Marinetti:

Ya sé que no te gusto, pero... ¿dónde has arrojado mi cabeza?